La carrera por la belleza ha llevado a muchas mujeres a las tumbas y a otras al borde de la muerte. Mujeres y hombres del medio artístico se han desbordado en arreglos y ajustes de sus cuerpos y rostros, para lucir cada vez más atractivos (as) y delgados (as).
Son muchos los casos, específicamente de mujeres del mundo del espectáculo, que han traspasado las paredes del quirófano, en donde han puesto su vida en peligro por causa de la cirugía estética.
El caso más reciente lo protagoniza la modelo y vedette venezolana Diosa Canales, quien esta semana publicó en su cuenta de Instagram el proceso de recuperación en el que se encuentra, luego de que se le explotara un implante de seno producto de una caída.
En su reporte, dice que se encontraba practicando el deporte que más le gusta, el pole dancing, y que, en medio de su rutina, algo salió mal y rodó al suelo. La modelo cayó sobre uno de su senos y se le reventó un implante. “Mis amores ayer fui operada de emergencia ... Porque practicando pole tuve una caída y una de mis prótesis se reventó... pronto estaré bien”, escribió en su cuenta de Instagram, información que acompañó de fotografías y un video en donde se observa el momento exacto en que la intervinieron quirúrgicamente.
Un caso local
Iniciando el año la bachatera Yanira la Exclusiva de la bachata, denunció que fruto de una cirugía estética se encontraba imposibilitada de continuar con su carrera artística.
Iniciando el año la bachatera Yanira la Exclusiva de la bachata, denunció que fruto de una cirugía estética se encontraba imposibilitada de continuar con su carrera artística.
Deyanira Bergés, como es su nombre de pila, denunció que luego de someterse a una liposucción, en un centro médico de la capital, su cuerpo presenta cicatrices en su espalda y vientre. El objetivo de Yanira era conseguir una mejor figura, y así, regresar al medio artístico con una nueva imagen, sueño que ha visto frustrado.
En el 2013 la conocida locutora Betty Pino, a quien se le conoció como la reina de la radio en Miami, falleció por complicaciones de la operación a la que se había sometido para remover de sus glúteos las siliconas que se había inyectado cuatro años atrás. El año pasado Joan Rivers, de 81 años, murió luego de una cirugía para evaluar sus “cambios de voz” y su reflujo estomacal.
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fuente:listindiario.com
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