Una joven embarazada de 22 años en la región de St. Petersburg, Florida, mató a cuchillazos a su propio perro de raza pit bull, cuando el violento animal atacó a mordeduras no solo a dos otras mascotas de la casa, sino también a la madre y la hermana de su ama, quienes sufrieron varias heridas y precisaron asistencia hospitalaria.
Sierra Willson apuñaló en repetidas ocasiones a Buster, su pit bull macho, luego de que el perro comenzó a atacar ferozmente a dos otros perros de la vivienda y a sus propios dueños, incluyendo la madre de Willson y su hermana menor.
La Oficina del Alguacil del Condado Pinellas informó en un comunicado que el ataque sucedió el viernes en la vivienda de la familia en Safety Harbor, cerca de St. Petersburg, en la Costa del Golfo de Florida.
Según la dependencia policial, el hecho se inició cuando el perro, que por su agresividad solía estar en un cuarto aislado, empezó a atacar a otros pit bulls de la casa.
Heidi Cooper, de 45 años, y su hija de 14 años, Meaghan Tokay, fueron a separar a los animales pero Buster se volvió contra ellas y las mordió numerosas veces, dejando a ambas con heridas en sus extremidades.
Willson acudió en auxilio de las mujeres que tanto ama y acuchilló varias veces al animal, que poco después murió apuñalado.
fuente:eldiariony.com
Una joven embarazada de 22 años en la región de St. Petersburg, Florida, mató a cuchillazos a su propio perro de raza pit bull, cuando el violento animal atacó a mordeduras no solo a dos otras mascotas de la casa, sino también a la madre y la hermana de su ama, quienes sufrieron varias heridas y precisaron asistencia hospitalaria.
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