Cuando Kira White entró el bar Blue Martini en Brickell en la madrugada del viernes, un mesero y otros testigos le dijeron a la Policía que vieron a la mujer de 23 años y se fijaron en los tatuajes que tenía: un par de zapatos de tacones altos y diamantes en la pierna izquierda y una estrella en la derecha.
Esa misma mañana, la Policía de Miami arrestó a White y la acusó de haber robado joyas y dinero que por un total de $70,000.
Los empleados del bar le dijeron a la Policía que eran los mismos tatuajes que hace dos semanas le vieron a la mujer que se fue del bar a la hora del cierre con un hombre lleno de joyas caras. El hombre le dijo a las autoridades que se llevó a White a su hotel para "divertirnos un poco más", tras conocerse en el lugar esa noche.
fuente:elnuevoherald.com
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