Las entrevistas del Consejo Nacional de la Magistratura dejaron momentos interesantes de rescatar en un compendio, tanto por los intercambios de palabras entre los aspirantes como por la importancia de las revelaciones y afirmaciones que se hicieron.
Probablemente la frase más acida la dejó caer el magistrado José Alejandro Vargas, titular de los juzgados de atención permanente del Distrito Nacional, quien declinó sus aspiraciones al Tribunal Superior Electoral (TSE).
Vargas dijo que prefería seguir codeándose con las personas malolientes del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, a propósito de la supuesta falta de confianza que le tenían los integrantes del Consejo.
Esa falta de confianza era una respuesta a las revelaciones que hiciera la diputada Josefa Castillo, opositora al Gobierno, de que el Procurador General de la República y el magistrado Fran Soto se habían opuesto a su candidatura de integrar la Suprema Corte de Justicia.
Vargas fue el juez que rechazó el acuerdo entre el Estado dominicano y la constructora brasileña Norberto Odebrecht para la colaboración en la delación quiénes recibieron sobornos para adjudicar obras públicas en el país.
fuente:listindiario.com
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