Latinoamérica y el Caribe es la región más violenta del mundo para las mujeres pese a que aumentó de 24 a 31 los países con políticas nacionales para la protección de las féminas entre 2013 y 2016.
Así lo revela el informe "Del Compromiso a la Acción: Políticas Públicas para erradicar la violencia contra las mujeres en América Latina y el Caribe", presentado hoy en Guatemala por ONU Mujeres.
La representante de ese organismo en Guatemala, Adriana Quiñónez, comentó que a nivel mundial una de cada tres mujeres es víctima de violencia.
Sin embargo, en América Latina y el Caribe dos de cada cinco féminas sufre violencia doméstica, alrededor del 30 % han sido víctimas de su pareja y 10,7 % sufrieron violencia sexual fuera de la pareja.
Sobre Guatemala, el informe destaca que posee una "alta jerarquía" en cuanto a mecanismos para el adelanto de las mujeres.
Quiñónez dijo que a pesar de los avances que realizan los países para frenar la violencia contra la mujer y las niñas falta mucho camino por recorrer para la implementación de políticas públicas, presupuestos y evaluación para acabar con este flagelo.
"Guatemala tiene una ley robusta pero no le ha permitido avanzar", dijo.
La representante de ONU-Mujeres atribuyó la violencia hacia ese género a la desigualdad, especialmente de las mujeres indígenas, las que tienen alguna discapacidad, las migrantes y la discriminación.
La representante de ese organismo en Guatemala, Adriana Quiñónez, comentó que a nivel mundial una de cada tres mujeres es víctima de violencia.
Sin embargo, en América Latina y el Caribe dos de cada cinco féminas sufre violencia doméstica, alrededor del 30 % han sido víctimas de su pareja y 10,7 % sufrieron violencia sexual fuera de la pareja.
Sobre Guatemala, el informe destaca que posee una "alta jerarquía" en cuanto a mecanismos para el adelanto de las mujeres.
Quiñónez dijo que a pesar de los avances que realizan los países para frenar la violencia contra la mujer y las niñas falta mucho camino por recorrer para la implementación de políticas públicas, presupuestos y evaluación para acabar con este flagelo.
"Guatemala tiene una ley robusta pero no le ha permitido avanzar", dijo.
La representante de ONU-Mujeres atribuyó la violencia hacia ese género a la desigualdad, especialmente de las mujeres indígenas, las que tienen alguna discapacidad, las migrantes y la discriminación.
fuente:listindiario.com
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